En los tiempos que corren y en gran medida gracias a la digitalización y a Internet, cuando visitamos un comercio los clientes tenemos muy claro que queremos adquirir y conocemos muy bien sus características. Sin embargo, en cuanto a salud se refiere, muchas son las veces que tenemos una idea muy clara de lo que necesitamos y al final, siendo debidamente asesorados, terminamos adquiriendo un servicio que nos deja con la duda de si realmente era lo que necesitábamos.
Esta pregunta se la hacen muchas de nuestras amigas y hoy os explicamos el fenómeno de la mascarilla y los tintes.
Yo solo quiero teñirme
Teñirse el pelo no es ni más ni menos que cambiar el color del mismo. Existen gran variedad de tintes ya sean de base química o de base vegetal; estos productos contienen pigmentos que se fijan a la cutícula lo que produce ese cambio de color que buscamos ya sea para cubrir unas canas o bien para cambiar de apariencia.
Es aquí donde «yo solo vengo a teñirme» comienza a ser un problema.
Para gustos los colores
En la actualidad los tintes han mejorado muchísimo. Sin embargo podemos encontrarnos cabellos muy sanos que están listos para teñir al instante, cabellos que requieren de una protección extra para asegurar un tinte satisfactorio y, en el peor de los casos, podemos encontrarnos cueros cabelludos que van a necesitar varias sesiones reparadoras antes de empezar a teñirlo.
En Mary Estilistas, además de los tintes tradicionales, encontrarás tintes sin PPD ni parabenos, de base vegetal, sin amoniaco y biodegradables. Sin embargo, pieles y cabellos hay tantos como gustos y colores puedes encontrar, esto supone que si bien los tintes son de una calidad excelente y dermatológicamente probados, cada persona es un mundo.
Mari de MARY ESTILISTAS
Entonces… ¿Me tiño o no me tiño?
La respuesta es SI. Si quieres teñirte no renuncies a ello.
Es en este punto donde entra a jugar la mascarilla. La mascarilla es un producto que aporta protección y vitaminas extra a tu cuero cabelludo; tiene dos funciones:
Aplicado antes del tinte, protege el cuero cabelludo para evitar que se dañe.
Aplicado después del tinte y tratamiento de calor, ayuda a sellar puntas e hidratar el cuero cabelludo.
En Mary Estilistas, antes de aplicar un tinte analizamos el cabello y asesoramos si el mismo requiere una mascarilla o no. En caso de necesitarlo pero la amiga que nos visita no quiere aplicarse la mascarilla, le informamos sobre las consecuencias que puede tener no aplicarlo, y ella es quien decide. Moral y profesionalmente nosotras no podemos arriesgarnos a aplicar un tinte y dañar un pelo. Eso terminaría dañando a nuestra amiga y a nuestro negocio.
Mari de MARY ESTILISTAS
¿Cómo sé entonces que mi mascarilla es buena?
Es aquí donde entra la tarea de un buen profesional dado que existen multitud de cabellos y multitud de mascarillas, cada una para un determinado uso y con unas propiedades distintas.
¿Cómo sé que una mascarilla es buena y adecuada para mi? Con experiencia.
La diferencia entre un vendedor local y un profesional de peluquería es la experiencia. A veces el método de ensayo y error funciona, y si ya has encontrado una mascarilla que te funciona no la cambies. Sin embargo, si no tienes una fija, dudas o la que tienes no te va bien; lo mejor es recurrir a tu asesor de confianza para dejarte asesorar sobre que mascarillas pueden irte bien.
Conclusión
Teñirse hoy en día es un acto muy normal y saludable gracias a los nuevos productos que existen. Sin embargo para teñirse correctamente hay que seguir una serie de pasos necesarios, como análisis del cabello, protección del mismo y aplicar el tinte adecuado. Si tu profesional te asesora sobre el uso de la mascarilla, lo normal es que sea por el bien de tu cabello. Ahora que ya lo sabes, no tengas miedo a teñirte y protege tu cabello.
La única manera de salir de un salón sin la duda de si realmente era necesario o no esa mascarilla, es la confianza. Encontrar un profesional que te genere confianza y que con su experiencia te asesore es la mejor manera de no dudar.
Mari de MARY ESTILISTAS
